Cada vez son más los seguidores de la construcción modular, una alternativa moderna en la construcción de viviendas. Ya sea porque sus precios son más económicos o porque los plazos de en- trega son más cortos, la cuestión es que este sistema está de moda y ya se considera en muchos casos como la primera vivienda. Así, es esencial que los profesionales de la decoración tengan en cuenta este tipo de inmueble como un nicho de mercado más, por lo que resulta interesante conocer esta tendencia. Una construcción modular es un proceso de construcción, de casas o edificios, realizado mediante la unión de secciones o módulos que son fabricados en una fábrica y posteriormente transportados y montados en la localización seleccionada. Se trata, por tanto, de una construcción “tipo Lego”, excepto por el hecho de que se necesitan grúas u otros medios de elevación para montar los módulos, para que constituyan un único edificio. En general, la intención es que la casa modular permanezca definitivamente en la localización don- de es montada, como si de una casa construida tradicionalmente se tratara.
Una de las principales diferencias entre este tipo de construcción y la construcción tradicional (obra) es que la modular posibilita colocar simultáneamente las paredes, los suelos, los techos y las cubiertas (proceso que permite reducir sustancialmente el tiempo necesario para concluir los trabajos), mientras que la construcción tradicional solo puede iniciar una fase si ya ha sido finalizada la anterior. Por lo tanto, la construcción modular es un proceso industrializado que , por norma, incluye montaje en fábrica y transporte, por lo que los materiales que lo constituyen deben ser resistentes pero ligeros. Igualmente, la canalización, la electricidad, el aislamiento y los revestimientos tanto exteriores como interiores se pueden realizar en fábrica y estar listos para su colocación en el emplazamiento elegido.
La conciencia ambiental y la sostenibilidad de las casas es otro punto que siempre se tiene en cuenta. Los fabricantes están concienciados con este asunto y siempre utilizan materiales de primeras marcas, siendo la gran mayoría reciclados. Todo ello para conseguir viviendas ecológicas y energéticamente prácticas tanto a nivel térmico, acústico o energético, como en el propio proceso de construcción, que precisa un bajo consumo energético, y utilizando materiales que son naturales y reciclables, dando todo como resultado un reducido impacto ambiental. Inicialmente, las casas modulares se construían en madera, pero en la actualidad existen otros materiales, como son:
A pesar de existir aún el mito de que las casas prefabricadas son de calidad inferior y este es uno de los principales recelos de quien va a comprar una vivienda así, este es un obstáculo que va perdiendo fuerza día a día, ya que las casas modulares actuales nada tienen que ver con aquellas casas móviles y roulottes del pasado. Ahora son verdaderas alternativas para aquellos que se encuentran en proceso de adquisición de una casa nueva. Se trata de casas modernas, ecológicas y personalizadas (todo lo que es posible), siendo este nicho de mercado debidamente explotado por el sector inmobiliario y también por los profesionales de la decoración, al tratarse de una tendencia en expansión.